Acechaba en los campos de batalla inspirando coraje y furia en los guerreros que la adoraban. Hurgaba entre los cadáveres de los derrotados en forma de cuervo o grajo, ambas aves asociadas a ella.
¿Quién era la diosa de la guerra celta?
Morrigan era una triple deidad (por sus tres transformaciones) que se hallaba presente en las leyendas irlandesas por sí misma o en la forma de alguna de sus transmutaciones, llamadas a veces como sus hermanas: Badb, Macha y Nemain.
Su poder destructivo era similar a su apetito sexual, por lo que se la asocia tanto a la muerte como a la nueva vida, ambos espectros muy ligados en el mundo celta.
Esta diosa pertenece a los Tuatha Dé Danann, los poderosos seres que habitaron Irlanda antes que los humanos.
¿Dónde aparece por vez primera?
Las primeras fuentes escritas en las que aparece Morrigan son unas anotaciones en los márgenes de una Biblia manuscrita en latín —del siglo IX— en el que se recogía, cuando el libro de Isaías hablaba de Lilith, a Morrigan como sinónimo de «monstruo con forma de mujer».
Etimología y significado de «Morrigan»
No está claro el origen de su nombre. Mor podría derivar de alguna antigua lengua indoeuropea y podría tener connotaciones de terror o monstruosidad. Los expertos suelen relacionar esta raíz con la palabra maere (del inglés antiguo) que tiene a su vez relación con la palabra «pesadilla» —nightmare— en el inglés moderno. También en los idiomas escandinavos la palabra utilizada para decir pesadilla es «Mara», con lo que guarda cierta conexión.
Rigan, la otra parte de su nombre, se traduce como reina. Expertos en las lenguas proto-celtas suelen referirse a esta diosa como Moro-rigani-s, lo que podría significar Reina de las pesadillas, o algo similar.
Otras acepciones, basándose en las lenguas irlandesas, dan el significado a Mor de «Grande», pronunciado con una O alargada, lo que le da el significado de «Gran Reina».
Fuente: Reto Histórico.